(Fuente: COSMO)
Esta crítica se ha escrito después de ver el primer episodio de la cuarta temporada de ‘Call my agent’ y no contiene spoilers.
La agencia de talentos ASK tiene por delante una etapa difícil. Con la marcha de Mathias todo se pone patas arriba y, ante el riesgo de una huida de estrellas, hay que reinventarse y volverse más eficientes. Esta es la trama principal de la cuarta temporada de Call my agent, la serie francesa que vuelvo hoy domingo a COSMO con su cuarta temporada, que será la última. Y es una lástima porque la ficción continúa estando en la mejor de las formas.
Con Charlotte Gainsbourg como protagonista — encerrada en un papel espantoso del que no puede escapar — enfrentaremos la marcha de Mathias, la oficialidad de Noémie y el devenir de ese “mar Andreático” en el que se han visto inmersos. Si no habéis seguido la serie hasta el momento no pasa nada, ya sabéis todo lo necesario. Una de las cosas buenas de Call my agent es que sus episodios son perfectamente entendibles de forma independiente, sigue siendo una propuesta divertida, muy francesa, con bromas atemporales y escenas de enredos que hacen cómplice al espectador enseguida.
Camille Cottin está tan ideal como siempre en el papel de Andréa, ejerciendo de jefa en una empresa en que la sangre joven coge cada vez más peso y donde definitivamente se trabaja menos de lo recomendable, o por lo menos de forma demasiado disoluta. Los famosos se suceden en un episodio en el que también podemos ver a Mimie Mathy, Xavier Beauvois, Julie Gayet y Dominique Besnehard haciendo de ellos mismos y siendo bastante obviados por la gente de ASK, más preocupada en los líos internos.
(Fuente: COSMO)
La capacidad de autoparodiarse bien por ser franceses, bien por ser miembros de la industria cinematográfica, sigue funcionando en una serie que logra reírse de uno con cierta mano izquierda y sin necesidad de entrar en la zafiedad. Esta es una propuesta amable y agradable incluso cuando hay que reír.
En medio de escenas sin mucho fondo se cuela una crítica a la consideración de la televisión, y en especial a las series diarias, de la mano de Mimie Mathy, planteando que quizás hay que comenzar a considerar que la gente que trabaja en la pequeña pantalla también son profesionales tan queridos por el público como los de las grandes producciones; es uno de esos detalles que se cuelan sin necesidad de hacer grandes aspavientos ni anuncios.
Pese a todo, la nueva temporada tiene ante ella el reto de cerrar una comedia que, si bien aguanta perfectamente gracias a su fórmula segura, también plantea pocos retos narrativos. Son las dos caras de la previsibilidad: sabemos qué nos encontraremos y, a la vez, hace que sea una apuesta difícilmente perdible.
‘Call my agent’ se emite los domingos a las 22:00h. en COSMO.
