Póster de la segunda temporada de ‘Las crónicas de Shannara’. (Fuente: Spike)
El enorme éxito de Juego de Tronos ha llevado a que muchas cadenas y plataformas de streaming busquen la manera de tener su propia serie de ese estilo para aprovechar los restos que la fantasía de HBO pueda dejar. De hecho, cualquier serie más o menos histórica o con una ambientación medianamente medieval se ha llevado su inevitable comparación con Juego de Tronos, daba igual que fuera Vikingos que Outlander.
Sin embargo, curiosamente, casi todas las series que han querido seguir la estela de la adaptación de las novelas de George R.R. Martin se han encuadrado más en la ficción histórica, y no en la fantasía épica, que es el género en el que se encuadra realmente. De hecho, la fantasía de espada y brujería lleva un tiempo desterrada de la televisión, que ha optado antes por criaturas mágicas, vampiros y reimaginaciones de cuentos de hadas.
La época en la que se producían (directamente para sindicación) las series de Hércules y Xena o su heredera espiritual, La leyenda del buscador, parecía estar acabada hasta que Daenerys y sus dragones se convirtieron en el mayor fenómeno televisivo planetario, con permiso de The Walking Dead, y la fantasía épica parece estar asomando de nuevo la patita.
La culpa de todo la tiene ‘Juego de Tronos’. (Fuente: HBO)
La noticia de que Amazon podría quedarse con la serie que Warner quiere desarrollar de El Señor de los Anillos es la noticia más significativa en ese aspecto. La plataforma de streaming está rediseñando su división de televisión en busca de un título con potencial de éxito global, y Juego de Tronos es el estándar en ese aspecto para el Hollywood actual. Sin embargo, al mismo tiempo, la serie de HBO no habría sido posible si no hubiera sido por la trilogía cinematográfica de Peter Jackson que adaptaba la saga de J.R.R. Tolkien. Es una cuadratura del círculo demasiado perfecta.
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Sin embargo, demuestra también la barrera que cualquiera de estas series tiene que saltar para que sean tomadas mínimamente en serio. Cuesta que sea un género de consumo masivo y, al final, hasta Juego de Tronos necesitó llegar a la quinta temporada a que los Emmy se dieran cuenta de que la nominaban todos los años y nunca le hacían caso (aparte de los premios a Peter Dinklage).
El Señor de los Anillos puede ser un paso a tener en cuenta si sale adelante, pero tampoco sería la primera saga fantástica de cierto renombre cuya adaptación a televisión se queda por el camino. La rueda del tiempo, de Robert Jordan, lleva unos cuantos años dando tumbos (ahora es Sony quien está desarrollándola) y de Crónicas de la Dragonlance se han visto, como mucho, películas animadas olvidables.
Geralt de Rivia ha tenido primero adaptación a los videojuegos en la saga ‘The Witcher’. (Fuente: Origin)
En el horizonte más próximo, de todos modos, hay dos proyectos que pueden ayudar a dar la vuelta a esta situación. Por un lado, está la adaptación de Netflix de la saga de Geralt de Rivia, de Andrezj Sapkowski, que primero ha centrado varios videojuegos y que tiene como protagonista a un brujo que se dedica a luchar contra diferentes demonios en la tierra. Y, por el otro, la productora Lionsgate será la encargada de una serie sobre la Crónica del Asesino de Reyes, la saga literaria de Patrick Rothfuss (que arranca con El nombre del viento), y que se verá en Showtime.
Estos proyectos pueden impulsar la presencia de la fantasía épica en televisión, pero todavía está lejos el momento en el que veamos un solo minuto de ellos. Y, por desgracia, NBC descartó seguir con su planeado reboot de Xena, la princesa guerrera.
La segunda temporada de ‘Las crónicas de Shannara’ se emite los martes por la noche en TNT.