Javier Cámara, en ‘Vamos Juan’. (Fuente: Virginia Martín Chico/TNT)
39 dramas y 14 comedias. Esa es la separación, por géneros, de las series que son elegibles para los Premios Feroz de 2020. De esas 14 comedias, cuatro se han emitido en cadenas en abierto a nivel nacional y dos, en televisiones autonómicas, y las demás son producciones de canales de pago o de plataformas de streaming. ¿Qué ha pasado para que ese género, que era el sostén de la ficción en las cadenas generalistas, haya entrado en ese bache de estrenos? Y eso que, en 2019, ha habido más propuestas; hace sólo un par de años, el panorama de la comedia era un verdadero drama.
Por las razones que sean, los estrenos que buscan hacer reír no tienen el mismo tirón para la industria. En abierto, sólo queda un exponente de las comedias que arrasaban en audiencia durante la década pasada, una La que se avecina que es capaz de resistir la programación esquizofrénica a la que la somete Telecinco, y en Antena finalizó este año Allí abajo, otra de las pocas que había logrado alcanzar la quinta temporada.
Con la crisis de audiencia de la televisión en directo, las comedias han sido expulsadas en favor de géneros que se considera que funcionan mejor a la hora de enganchar al público, como el thriller y el misterio. ¿Pero qué ocurre entonces con las pocas comedias que se producen?
Pues que están viviendo también su propia evolución, su propia fase experimental. La entrada de Movistar+ en la producción propia llevó a que se probaran tipos de humor que se salían del costumbrismo que había dominado las pantallas durante los 2000. Se ha apostado por el humor metarreferencial, el de vergüenza ajena, la parodia/homenaje, la comedia más negra… Lo mismo tenemos un extraterrestre de más de dos metros amenazando, con acento manchego, con exterminar a la humanidad que un robot de cocina no demasiado bueno que genera toda una trama pseudocriminal. Detrás de las risas hay mezclas de géneros e intentos por ofrecer algo distinto.
Lo triste es que eso no se pueda ver en abierto. Hasta series producidas originalmente para las cadenas generalistas, como El pueblo, se han emitido primero en una plataforma digital. Esa patente diferencia de cantidad en las series elegibles para los Feroz podría hacernos creer que es en el drama donde está la renovación de la ficción española, pero la comedia está animándose a ir a sitios que están vedados si no se hace humor con ellos.
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