(Fuente: IMDB)
Esta crítica se ha escrito después de ver la sexta temporada de ‘Los 100 ’ y contiene spoilers.
La sexta temporada de Los 100 ha sido la de la búsqueda de redención. Las mochilas que cargan Clarke, Octavia y Abby están llenas de piedras y, quienes las rodean, aprovecharon todas las oportunidades para recordarles constantemente cada uno de sus errores; como si no fuera suficiente con sus propios sentimientos de culpa.
La mente de Abby murió en lugar de la de Maddy. Octavia hizo lo posible por reconciliarse con Bellamy y aceptó sin dudarlo la puñalada de Hope. Clarke se vio obligada otra vez a decidir si apretaba un botón y al hacerlo lanzó el cuerpo de su madre, en el que ya no habitaba la Abby que conocía, al vacío del espacio: floated.
Las batallas de Octavia y Clarke se lucharon en sus propias mentes y contra las peores versiones de sí mismas. Octavia se enfrentó a Bloodreina y Clarke a las verdades de las que no podía escapar y a las que tenía acceso Josephine. Una situación paralela fue lo que ocurrió con Maddy y Sheidheda, un antiguo Commander, que habría funcionado mejor si no fuera un villano tan unidimensional.
El final de esta temporada quizá sea el menos espectacular de la serie, pero Los 100 demostró que no olvida nada de lo que le ha ocurrido a los personajes y esa es una de sus fortalezas. En cuanto a los elementos de ciencia ficción, la serie regresa una y otra vez al origen de todo: Becca y su trabajo. Toda la tecnología de digitalización de la conciencia ha marcado la mitología de la serie y es la base de la cultura que se impone en cada lugar y cada época. Así ocurrió con la flame de los Grounders (falta por ver qué ocurrirá a partir de ahora) y así se impusieron los Prime en Sanctum.
(Fuente: IMDB)
Entre los misterios plantados para la próxima (y última) temporada están descubrir qué ha pasado con Jordan (lamentablemente nunca ha conseguido que nos importe mucho), cómo encontrarán la forma de convivir todos en Sanctum, qué repercusiones tendrá que Sheidheda se haya instalado como un virus en la Eligius o el paradero y los peligros a los que se enfrenta Octavia.
Porque Russell habló de otros planetas, pero con todos los secretos de la Anomalía, parece que ya tienen suficiente por explorar en los episodios de cierre. Su funcionamiento es parecido, en parte, a un portal temporal, porque Octavia regresó curada (y con el pelo limpio), con un tatuaje con claves y Hope tiene 20 años. Hay muchas preguntas por resolver: cómo fue creado, por quién, por qué algunos pueden entrar y salir, quién es el “he” misterioso que tiene capturada a Diyoza y qué aventuras ha vivido en ese lugar que desconocemos.
(Fuente: IMDB)
“I tried to do better, and then I lost my mom. Tell me it was worth it”.
-Clarke.
No queremos terminar esta crítica sin mencionar lo impactante que fue escuchar la historia de Echo cuando era niña. Lo que pasó, solo lo sabemos nosotros, pero ojalá esto signifique que su personaje pueda desarrollarse un poco más, aunque sabemos que los guionistas tienen mucho trabajo sobre la mesa.
Lo más importante es que, al final, a los Sky kru y, sobre todo a Clarke (que está haciendo un viaje de la heroína para escribir ensayos académicos), les queda el consuelo de que cumplieron el deseo de Monty: “Be the good guys”. Algunos regresaron a Sanctum con nuevos traumas por superar, pero todos dispuestos a continuar la lucha. Ahora, más unidos que nunca: “Side by side”. Esperamos que cuando Octavia vuelva lo haga repitiendo repita su frase del piloto: “We’re back, bitches!”
‘Los 100’ se emite en SyFy España.
Crítica: ‘Los 100’ vuelve a sus mejores tiempos con la temporada 6
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