(Fuente: HBO España)
Esta crítica se ha escrito tras ver la primera temporada de ‘La amiga estupenda’ y contiene spoilers.
El estreno de La amiga estupenda quizá llegó un poco tarde para que fuera tenido en cuenta en más listas de lo mejor del año en España. O es así como elijo justificar su ausencia en ellas. Fue la serie más vista en Italia y ha funcionado bien en sus emisiones en Sky (Reino Unido) y HBO (Estados Unidos). Ya ha sido renovada por una nueva temporada y ha conseguido una nominación como mejor serie dramática en los próximos Critics Choice Awards.
Cuando, hace unas semanas, os hablamos de sus dos primeros episodios aún no habíamos podido ver el trabajo de las actrices Gaia Girace y Margherita Mazzuco. Ellas son las encargadas de encarnar a Lila y Lenù como adolescentes y no decepcionan, sus interpretaciones son tan magnéticas como sus personajes y consiguen transmitir toda su fuerza y fuego interior.
En aquella crítica describí el trabajo de dirección de Saverio Constanzo como un sacrificio de la narración visual al servicio de la palabra escrita. Después de ver la temporada completa me retracto de aquella valoración; si bien esta adaptación es muy fiel a la obra original de Elena Ferrante, Constanzo consigue momentos de gran belleza y profundamente emocionales, y si está al sacrificio de algo, es de la historia de estas dos amigas.
(Fuente: HBO España)
Una historia que es la de Lila y Lenù como individuos, la de su relación de amistad mientras crecen, y la del Nápoles en el que se ambienta. Un Nápoles violento, con miserias y profundas diferencias de clase; una sociedad en la que impera la ley del más fuerte y un destino escrito del que parece imposible escapar. Un universo masculino cuyas dinámicas de poder ejercen una constante opresión en sus mujeres, un mundo que puede dialogar con comunidades cerradas de otras series contemporáneas como Top of the Lake o Heridas abiertas.
Esa cultura del crimen organizado de Nápoles es la que ha sentado las bases de obras como El padrino o Los Soprano, pero a diferencia de aquellas, centradas siempre en la experiencia de los amos de la mafia, en La amiga estupenda tenemos la oportunidad de explorar el punto de vista femenino, los retos que les supone y cómo deciden enfrentarlos: adaptándose y usando las herramientas que tienen a su alcance para construir vías de escape.
(Fuente: HBO España)
Es una historia de coming of age en un entorno hostil que enfrenta a Lenù y a Lila a situaciones muy difíciles, muchas veces traumáticas, en las que cada relación está retratada como una negociación constante con el poder que posee el varón. Y su amistad está en el centro de todo, con una dinámica cambiante y competitiva en la que cada una puede ser fuente de frustración, por representar aquello a lo que aspiran y no pueden tener, pero, sobre todo, como inspiración y admiración mutua. La complejidad de esa relación es el mayor mérito de novela y serie, en cuyas narraciones asumimos que Lila es la amiga estupenda, hasta que se refiere así a Lenù. Ambas lo son.
La segunda temporada de la serie adaptará el segundo volumen de la saga Dos amigas de Elena Ferrante, que en España se ha publicado como Un mal nombre (The Story of a New Name), y nos contará cómo continúa la historia de esta amistad después de que la visión de unos zapatos convirtieran la sonrisa de Lila en repulsión, al ver rota la promesa del hombre con el que ahora tenía que compartir su vida. Su estreno está previsto para finales de 2019.
‘La amiga estupenda’ está disponible en HBO España.
