(Fuente: BBC)
Esta crítica se ha escrito tras ver la primera temporada de ‘Trigonometría’ y no contiene spoilers.
Trigonometría es de esas historias que cuentan algo más de lo que de entrada aparentan. La primera temporada se puede ver en HBO España, aunque originariamente es de BBC, y viene dispuesta a hablar de amorcito del bueno, del intenso y del que deshace los esquemas: su trama se desarrolla alrededor de un trío. No encontraremos prácticamente arcos secundarios, porque es una serie que tiene muy claro qué quiere contar y que no lo va a hacer separándose demasiado de la ruta principal, aunque aprovecha la situación para tratar otros temas.
La protagonista es Ray, una atleta olímpica de natación sincronizada que, a raíz de un accidente en la piscina, deja el deporte y tiene que encontrar un nuevo rumbo. Y decide hacerlo alejándose de sus padres por primera vez ya que, aunque tiene 30 años, la siguen tratando como su pequeña, crecida entre algodones en un entorno limitado y controlable. Como no tiene suficiente dinero para vivir sola en su nueva ciudad, Londres, opta por compartir piso con una pareja formada por una cocinera llamada Gemma y Kieran, un ex-militar que en la actualidad es técnico de emergencias sanitarias.
Son tres personas que siguen siendo jóvenes, pero han perdido la locura de la adolescencia. Lo de Gemma y Kieran es amor con solera, pero no acaba de ir bien porque hay algo que no les permite funcionar en sincronía y que hace que la relación pierda agilidad. No sucede así cuando están con Ray: de golpe todo encaja a la perfección.
Trigonometría no es una historia sobre sexo y ganas de probar cosas nuevas, sino sobre lograr la fórmula que haga que tres personas a las que les faltaba algo encuentren su lugar en el mundo. Y también sobre cómo enfrentarlo ante los más cercanos, cómo explicar que amas a dos personas, que es recíproco, que mejoran tu vida y hacen de ello algo que valga más la pena. Quizás sea una serie que se pase de empalagosa para algunos gustos, como he dicho no se trata de una noche de locura, sino de algo más profundo que habitualmente estamos acostumbrados a ver únicamente entre dos personas. Es bonita y dulce, aunque lo pinta todo con una capa de intensidad que puede llegar a saturar.
Si buscas un lugar reconfortante al que acudir, ver una profunda historia de amor y algo de drama que salpimiente las vacaciones, Trigonometría es una apuesta segura.
La primera temporada de ‘Trigonometría’ está disponible en HBO.
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