Verónica Sánchez e Irene Arcos protagonizan ‘El embarcadero’. (Fuente: Movistar+)
El embarcadero ha vuelto para cerrar su historia. La serie de Movistar+ se planteó desde el principio como un todo compuesto por dos temporadas, la primera para conocer al triángulo amoroso compuesto por Alejandra, Verónica y Óscar (Verónica Sánchez, Irene Arcos y Álvaro Morte, respectivamente) y la segunda, estrenada el pasado viernes, para desentrañar todas las incógnitas planteadas, abrir y cerrar heridas.
Unos nuevos episodios en los que se invierte la dinámica de los personajes y también el planteamiento: “En el último capítulo de la temporada anterior cambiamos el prisma de la narrativa, pasando de ser a través de Alejandra, que nos ha acompañado en los ocho primeros episodios, hacia Verónica y vemos su perspectiva”, nos explica Esther Martínez Lobato, coatura de la serie junto a Álex Pina. “En ese episodio empiezas a sentir que no es todo tan feliz como te han ido contando sobre esa vida salvaje que parecía muy bonita, sino que ella ha sentido emocionalmente el dolor en los mismos momentos que Alejandra”, dice la guionista.
La fragilidad de Verónica
Irene Arcos intepreta a Verónica. (Fuente: Movistar+)
“Verónica va a transitar en esta segunda temporada por sus sombras. Llega la culpa a ella, una culpa muy enfermiza que saca cosas que tenía ocultas y la sacude por dentro”, dice sobre su personaje Irene Arcos. “Nos vamos a encontrar con una Verónica más insegura, con los miedos a flor de piel; todo lo que ella se había construido sobre sí misma, sobre la vida, sobre como miraba el mundo, de repente piensa que no está bien porque son cosas que pueden hacer daño a otros”. Y añade sobre este cambio: “Si antes veíamos a una Verónica luminosa, fuerte, segura, ahora nos vamos a encontrar con una mujer con más dudas, más frágil y más trillada por la culpa”.
Alejandra encuentra su fortaleza
Verónica Sánchez es Alejandra en ‘El embarcadero’. (Fuente: Movistar+)
“Ahora Alejandra hace el camino contrario”, comenta la actriz Verónica Sánchez. Su personaje cede protagonismo en la historia, pero va encontrando el equilibrio: “Ella lleva toda la vida queriendo contentar a los demás y sin preguntarse quién es ella y por fin empieza a liberarse. Algo tan abrupto como la muerte de su marido la transforma y va cogiendo las riendas de la persona en la que se quiere convertir. Se está haciendo cada vez más fuerte en el momento en el que Verónica se agrieta. Es muy bonito, porque la relación entre las dos crece aún más precisamente porque se cambian un poco los papeles”.
¿Vínculo sano o relación tóxica?
Durante la primera temporada de El embarcadero vimos a Alejandra inmiscuirse en la vida de la amante de su marido, estrechando lazos hasta el punto de terminar acostándose juntas. ¿Se trata de una conexión real o el comienzo de una relación tóxica? “Yo creo que es real, se está estableciendo un vínculo entre ellas, se apoyan y son lo mejor que tienen”, responde Irene Arcos. “A mí me parece precioso y cero tóxico”, añade su compañera Verónica Sánchez, 12Al final, cómo te relacionas con el otro es una elección. Ellas, que a priori son rivales, en vez de elegir lo que la separa, eligen lo que las une, que es esa persona que tienen en común”.
“Puedes pensar que la reacción de una mujer al encontrarse con la amante de su marido debe ser tirarse de los pelos, montar un pollo y que sean rivales, pero se colocan desde otro lugar”, expone Arcos. “Una de las escenas que más me gusta de toda la serie es cuando se encuentran ellas y cómo Alejandra ve a una mujer rota y lo que hace es empatizar con su dolor. Tú dolor también es mi dolor. Por eso lo que se establece entre ellas nace de la empatía y es real”, zanja.
Recta final y… ¿final polémico a la vista?
Sobre esta segunda temporada de El embarcadero, Esther Martínez Lobato afirma: “Todos los personajes son llevados a sus últimas consecuencias, hasta límites de locura y más virados al thiller, a la tensión y a explotar bombas emocionales a lo loco en el último tramo”. No habrá, dice, cabos sueltos al final: “Se dan respuesta a todas las preguntas que se plantearon en la primera temporada”.
Por su parte, Irene Arcos no se atreve a presagiar si el cierre de la serie de Movistar+ nos gustará o no: “Los finales son finales, no todo el mundo estará contento. Pero tampoco es esta una serie que esté hecha para gustar a todo el mundo. Creo que es algo arriesgado y especial, habrá gente que conecte y gente que no”.
‘El embarcadero’ está disponible completa en Movistar+.
Podcast: Review — ‘El Embarcadero’ (ep.71)
Comentamos el último estreno de producción propia de Movistar+ creado por Àlex Pina y Esther Martínez Lobatofueradeseries.com