Una imagen de ‘Territorio Lovecraft’. (Fuente: HBO España)
Queridos amigos, hoy quiero confesar algo. Quiero confesar que, durante mucho tiempo, yo también fui de esos lectores estrictos y snobs que querían ver libros adaptados a la pantalla con puntos y comas. Que cayeran las siete plagas de Egipto sobre tu cabeza si alterabas lo más mínimo la trama o los personajes. Sin embargo, algo ocurrió en aquellos años en los que El Señor de los Anillos y la saga de Harry Potter empezaron a convertirse en películas: que dejó de importarme que La comunidad del anillo hubiera ignorado a Tom Bombadil y me pareció un rollo que Harry Potter y la piedra filosofal metiera literalmente toooodo lo que había en el libro en una película de dos horas y media.
La clave de la adaptación está en ser fiel al espíritu del libro. Territorio Lovecraft, por ejemplo, está recibiendo protestas de lectores del original de Matt Ruff porque el segundo capítulo introduce un elemento diferente. ¿Y? ¿Viola lo que Ruff quiere contar? La serie de Watchmen es infinitamente mejor adaptación del cómic de Alan Moore que la película viñeta por viñeta de Zack Snyder porque entiende de qué va la historia, cuál es su espíritu, qué es lo que la impulsa. No basta con tener al Comediante cayéndose al ritmo de Bob Dylan por la ventana; hay que conocer bien qué tipo de mundo produce a ese tipo de personajes.
Cada vez que se estrena una serie que parte de un libro, saltan los puristas que se indignan porque tal personaje tangencial y muy secundario no aparece, o porque Juego de tronos eliminó todas las tramas de los libros que, claramente, no iban a tener importancia en el final (como Lady Corazón de Piedra). George R.R. Martin puede permitirse el lujo de dedicar cientos de páginas a explorar la venganza ciega a través de ese personaje; la serie de HBO tenía unas constricciones de tiempo y dinero que no lo permitían.
Finalmente, aprendí a no estar constantemente queriendo adelantarme a lo que voy a ver en pantalla porque lo he leído antes, y aprendí a dejarme llevar. Cuando se emitía Perdidos, los espectadores obsesionados con el final y con ser los primeros en encontrar todas las pistas y desvelar el misterio se reían sistemáticamente de quienes pretendían solo pasar un rato entretenido semana a semana, quienes podían especular con qué significaba eso que acababan de ver, pero no fiaban su disfrute de la serie a que les dieran justo la respuesta que ellos esperaban.
Creo que aquellos espectadores lo pasaron mejor.
Todas las referencias de la escena inicial de ‘Territorio Lovecraft’
Los guiños del primer capítulo también describen los temas de la serie de HBOfueradeseries.com