Netflix ha sido el primer gran estudio en aplicar al máximo el protocolo covid previsto por el acuerdo sectorial en Hollywood a raíz del repunte de la pandemia que está ocurriendo en el país. La plataforma de streaming ha comunicado a su personal que todos aquellos trabajadores que se encuentren dentro de la “Zona A”, es decir, actores y aquellos que trabajen próximos a ellos, tendrán que estar vacunados obligatoriamente.
Esta acción estaba recogida en dicho acuerdo, realizado por estudios y sindicatos el 20 de julio, que establecía la medida de vacunación obligatoria como una opción, así como definía el grupo laboral de esa “Zona A”. Netflix no ha sido la única en aplicar las medidas más restrictivas previstas; algunas producciones concretas como Gaslit, la realizada por Universal y Starz, han adoptado ya estos protocolos.
La noticia llega después de la urgencia provocada por el repunte de la pandemia debido a la variante Delta del virus, que está afectando multitud de producciones que se ven paralizadas al detectar positivos dentro del equipo, como Los Bridgerton o Westworld. Es una situación, que de forma humana y económica, ha llevado a grandes estrellas a intentar ejercer presión usando su estatus para exigir ciertas condiciones de seguridad como es el caso de Sean Penn, quien recientemente se plantaba diciendo que no retomaría el rodaje de Gaslit si no se vacunaba a absolutamente todo el equipo.
La medida adoptada por Netflix podría marcar tendencia en el resto de majors, las que más nivel de producción y dinero tienen en juego. La plataforma roja prevé pocas excepciones a esta norma, que podría permitir no vacunar a aquellos que se atengan a condiciones médicas, religiosas o por edad, así como no plantea paralizar algunas producciones ya empezadas y a punto de completarse.
