(Foto: RTL)
Esta crítica se ha escrito después de ver los cuatro primeros episodios de ‘Capitani’ y no contiene spoilers.
A pesar de ser una de las premisas más populares de la ficción televisiva de los últimos años, el género criminal ha sabido explotar sus encantos diversificando el carácter de los investigadores, el tipo de homicidio a resolver o el entorno en el que se producían. Y aunque su planteamiento inicial pueda parecer ya visto, los creadores todavía son capaces de imprimir un carácter propio a sus producciones a partir de esas premisas.
Eso es lo que sucede con Capitani, la serie luxemburguesa (sí, en Luxemburgo también hacen series) que acaba de llegar a Netflix para proponer a los suscriptores la misteriosa muerte de una adolescente en un bosque. Y es una propuesta que no se diferencia demasiado de otras que hemos podido ver recientemente, pero es fácil engancharse a ella gracias a las particularidades de su historia.
Compuesta por diez episodios de media hora de duración, esta producción criminal está protagonizada por el hombre que le da nombre (Luc Schiltz), un miembro de la policía judicial que en su día libre es enviado a un pequeño pueblo para ayudar en la investigación de lo que parece un asesinato. La víctima es una joven, pero no tardará en descubrir que, además, su hermana gemela ha desaparecido.
(Foto: RTL)
Capitani, que como cabría esperar es un hombre de carácter poco amigable, se traslada al pueblo para liderar la investigación y escoge a Elsa (Sophie Mousel), una joven policía local, como compañera. Ella será su nexo con los vecinos del pueblo, pero también le mostrará los tejemanejes de una localidad en la que hay demasiados secretos y poca gente interesada en saber la verdad.
Lo que comienza siendo una investigación criminal se convierte en una desesperante lucha de intereses que alcanzan a la alcaldía y al centro en el que estudian las jóvenes. Es el ambiente ideal para que los lugareños miren con recelo al policía llegado de la ciudad y para que este desconfíe de todo y de todos, incluso de aquellos que se supone que tienen que trabajar para resolver el caso.
La breve duración de sus capítulos, su eficaz planteamiento narrativo y su novedosa ambientación son algunos de los puntos fuertes de esta serie que no propone nada nuevo pero que es capaz de conseguir que el espectador quiera saber más sobre ella. Porque el encanto de “pueblo pequeño, infierno grande” siempre resulta tan inquietante como irresistible.
‘Capitani’ está disponible en Netflix.
