Esta crítica se ha escrito después de ver los cinco primeros episodios de ‘Bienvenidos a Utmark’ y no contiene spoilers.
Al norte de Noruega existe un territorio de una belleza inusitada en el que vive la mayoría de población Sami, un pueblo indígena noruego cuya antiquísima cultura en torno a la crianza de renos, música ancestral y artesanía tradicional convive hoy en día con un moderno estilo de vida y las nuevas tecnologías. En esta localización es donde se desarrolla la nueva ficción escandinava de HBO España, Bienvenidos a Utmark, un drama de ocho episodios con tintes de comedia negra que explora las relaciones de una comunidad anodina llena de personajes, a cada cual más extraño.
Todo aquel que se acerque a esta serie noruega se va a encontrar con dos ficciones que ejercen clara influencia en su historia y la construcción de sus personajes: Fargo y Twin Peaks. Los personajes escritos por Kim Fupz Aakeson (Que viene el lobo, Venganza bajo cero) tienen cierta pátina de esa extravagancia y oscuridad que David Lynch imprimía en su obra, pero sin asomarse al mundo onírico tan característico de su serie; por tener, tiene hasta a su propia versión de la mujer del leño. En cuanto a Fargo, más allá de la evidencia de la nieve y el frío, contemplamos esas situaciones tan características entre los personajes de las historias de Noah Hawley que van enredando la trama, aunque sin lograr la fluidez que sí tiene la premiada serie americana.
Bienvenidos a Utmark se desarrolla en un lugar muy rural, una localización de apariencia ruda en la que la naturaleza indómita ocupa más hectáreas que la civilización y marca la personalidad de este western nórdico. La belleza de los parajes salvajes del ecosistema noruego son utilizados como reclamo de una vida más tranquila y pacífica lejos de grandes ciudades como Oslo. Así, el director de la serie, Dagur Kári (Corazón gigante), se sirve del personaje de Kari, una profesora recién llegada al pueblo que se encuentra en esa búsqueda de sí misma y de crear una vida y familia nuevas, para introducirnos en la vida del pueblo. Su personaje, pese a no ser el principal ni avanzar mucho en la historia, es el que sirve de ojos al espectador, pues en su idealización de esta nueva vida se va a dar de bruces con la realidad y los conflictos que allí encuentra.
Como serie coral que es, el compendio de personajes que se dibuja en la historia del pueblo es variado. Lo componen, entre otros, un sheriff con Crohn, un funerario, la vicaria, el proxeneta viudo y sus prostitutas albanas, la dependienta del súper que tiene posesiones, el matón del pueblo y el granjero y su familia. Precisamente estos últimos son los verdaderos protagonistas de la serie: Bilzi, un sami con negocios ilícitos, el granjero, Finn, y su mujer, Siri. Será a través de ellos de quienes conoceremos más sobre sus vidas y rencillas, además de Marin, la hija de doce años de Finn y Siri, y única persona en la zona con cierta madurez y criterio para solucionar los conflictos.
Bienvenidos a Utmark gustará a los que quieran ver una serie de desarrollo lento, cuyas tramas se desenvuelven a un ritmo muy pausado, demasiado, por momentos. Poco a poco iremos conociendo algo más de todos los componentes del pueblo y de las conexiones que les mueven para hacer según qué cosas, en una exploración de los conflictos vecinales y sociales que se describen con un trazo demasiado grueso como para ahondar en ellos. Por el camino surgen temas como el alcoholismo, la ludopatía, la violencia de género, el respeto por la naturaleza y tradiciones o el trato entre niños y adultos, pero que son meros trazos que dotan de una capa superficial a los habitantes del pueblo de Utmark y no se exploran como debiera.
No obstante, si hay algo en lo que destaca la nueva ficción escandinava de HBO España es el magnífico uso de la fotografía de la que se encarga Andreas Johannessen. La representación visual de esa naturaleza tan rústica y salvaje y la recreación de escenas de renos en movimiento o de caza dejan para el recuerdo unas preciosas estampas de una de la más zonas más inhóspitas de la Tierra. Ahora que conocemos un poco mejor a la Noruega vaciada gracias a Bienvenidos a Utmark, ¿seguiremos idealizando tanto a sus vecinos, territorios y naturaleza?
‘Bienvenidos a Utmark’ está disponible en HBO España.