Esta crítica se ha escrito tras ver la temporada completa de ‘Batwoman’.
Claramente, la Batwoman que veamos en la segunda temporada puede ser una serie bastante diferente de la que hemos visto hasta ahora. No solo por la salida de Ruby Rose, la protagonista principal de la ficción, sino por lo que construye su último capítulo de cara al año que viene. Que es una nueva trama con respecto a lo que habíamos estado siguiendo hasta ahora. Realmente, en veinte episodios hemos visto varias líneas argumentales serializadas que se desarrollaban según los diferentes bloques en los que se ha dividido la temporada por su emisión: la venganza de Alice del comandante Kane al principio; la revelación de lo que ocurrió durante su secuestro antes del crossover Crisis en Tierras Infinitas; la entrada en escena del diario de Lucious Fox y esa trama corrupta dentro de los Cuervos y, finalmente, la búsqueda de la kryptonita que pueda matar a Batwoman.
A veces, ha dado la sensación de que la serie se iba cansando de sus propias historias y pasaba a otra para encontrar alicientes para aguantar veinte episodios, aunque sí ha habido varios temas que se han mantenido constantes y se han ido desarrollando a lo largo de la temporada, como la asunción de Sophie Moore de que no puede seguir ocultando quien es, la inquina asesina de Kane hacia Batwoman o que Kate se dé cuenta de que Alice nunca será la hermana que perdió siendo pequeña.
Hemos visto algunos aciertos: hubo varios capítulos muy sólidos justo después del crossover, cuando Batwoman decide anunciar públicamente su homosexualidad y aparece esa Beth de un universo paralelo. Las interacciones entre Kate y Alice siempre eran entretenidas porque Rachel Skarsten ha logrado que su villana sea genuinamente imprevisible, manteniendo un poco de corazoncito al mismo tiempo, y se ha ido construyendo a Mary como una secundaria igualmente divertida.
El retrato de su personaje principal es lo que ha ido diluyéndose con el paso de los capítulos. Sabiendo lo que sabemos ahora, merece la pena preguntarse si la difícil relación entre Ruby Rose y el equipo llevó a que, por ejemplo, Kate prácticamente solo interactuara con Luke y Mary, o si es que los guionistas ya habían desarrollado su personaje todo lo que daba de sí en esta entrega y prefirieron ir matizando a los demás. Realmente, en cuanto Kate y su padre encierran con engaños a Alice en Arkham, la serie encuentra mucho más fascinante ver qué van a hacer ella y su Ratón para darle la vuelta a la situación.
(Fuente: The CW)
Alice, por ejemplo, pone en marcha una trama que promete mucho de cara a la segunda temporada al transformar a Tommy Elliot en su adoradísimo Bruce Wayne, alguien que, recordemos, lleva años desaparecido de Gotham. Ellos, además, saben que es Batman, por lo que las complicaciones que pueden crear son infinitas. Además, representan un potencial problema para Kate bastante más intrigante porque es muy personal para ella, pues al fin y al cabo, se convierte en Batwoman para continuar el legado de su primo.
El otro aspecto que centra el final de temporada es la convicción de Jacob Kane de que debe acabar con la Mujer Murciélago. Está bien que personajes como Mary o Sophie le echen en cara lo que ya se apreciaba de los Cuervos en el primer capítulo, y es el hecho de que ellos también son justicieros que operan al margen de la policía y que, además, solo protegen al 1% capaz de pagar sus servicios. ¿Es por eso por lo que Kane odia a Batwoman, porque la ve como competencia desleal?
El padre de Kate es un personaje unidimensional que, por otro lado, encarna ese privilegio de hombre blanco que cree estar en posesión de una verdad que nadie más ve. Ha terminado volviéndose repetitivo, no obstante.
La posición que Batwoman ocupa en el Arrowerso es el de la sucesora natural de Arrow. Sus personajes no tienen superpoderes, su protagonista es también una millonaria con una vida sentimental complicada y todos se mueven en una ciudad oscura y corrupta. En algunos de los últimos capítulos (dirigidos, por cierto, por actores como Paul Wesley y Amanda Tapping), las secuencias de acción han lucido bastante más espectaculares y, visualmente, toda la serie parece haber dado un salto de calidad.
(Fuente: The CW)
El reto que se abre ante la ficción para la segunda temporada es bastante peculiar. Aparte de tener que buscar a otra actriz que interprete a Kate Kane, Batwoman va a tener que lidiar con ese falso Bruce Wayne, con un Jacob Kane todavía más empeñado en acabar con la justiciera y con ese pedazo de kryptonia que Kate esconde por encargo de Supergirl por si, algún día, tiene que usarlo contra ella, pero que puede representar también su final. Y, de remate, tiene que rehabilitar como secundaria a Sophie Moore, perdida en el tramo final.
La primera temporada ha sido, en general, correcta y con algunos episodios destacables más por los temas que tocaban que por su ejecución, pero se nota igualmente margen de mejora. Mantener las amenazas personales para Kate puede ser la clave. Lo fue para que la segunda temporada de Arrow, por ejemplo, fuera bastante mejor que la primera.
‘Batwoman’ está disponible en HBO España.
‘Batwoman’ se queda sin Ruby Rose, que no seguirá en la temporada 2
La actriz, que interpretaba a la protagonista, ha anunciado su marcha de la seriefueradeseries.com