(Fuente: HBO España)
Si os preguntabais qué había sido de la vida de Issa desde que el año pasado la dejamos en la puerta de la casa de Daniel, los primeros 90 segundos de Better Like, el primer episodio de la tercera temporada de Insecure, nos dan la respuesta con un montaje de imágenes que demuestra que la serie ha vuelto más cinemática y divertida que nunca. Y que nuestra protagonista ha vivido mejores épocas en su vida.
Issa sigue durmiendo en el sofá de Daniel, en una casa que carece del aislamiento acústico de su estudio de producción, lo que convierte las noches de romance de su compañero de piso en noches de tortura para ella. Para escapar de lo incómodo de la situación, y con la esperanza de ahorrar para pagarse un alquiler en solitario, acude a recoger a un usuario de Lyft, un servicio tipo Uber. El usuario sube, saluda, y vomita. ¡Bienvenidos a Insecure!
La introducción es tan buena que no echamos de menos las rupturas de la cuarta pared en las que Issa nos rapea lo que está pensando. En el trabajo de día las cosas no le van mejor; ahora está relegada a trabajo de escritorio y cuando quiere ser proactiva, su jefa levanta un muro más helado que el de Juego de tronos, aunque será curioso ver cómo evoluciona el tema que ha sacado Issa de debajo de la alfombra, porque ha sido un bulto que siempre ha estado allí y que todos ignoran desde el primer episodio.
(Fuente: HBO España)
El único punto a su favor, y es uno del que puede sentirse orgullosa, ha sabido mantener (hasta el momento) ciertos límites con Daniel (personaje que esta temporada ha pasado a tener punto de vista) y ha sido honesta con relación a cómo se siente en términos de convivencia.
Límites y honestidad son también las cartas de Molly, que ha aprendido a negociar en el trabajo y en la cama, sabe lo que quiere y no está dispuesta a firmar por menos de lo que se merece. Su reencuentro con Issa, la escena en el restaurante, y la de la Party Lyft, fiesta que, por cierto, acaba muy mal, son lo mejor de un episodio que no resiente la ausencia de Lawrence, y que es uno de los más sólidos de la serie. A estas alturas ya no debería sorprendernos porque en la temporada anterior la propuesta de Issa Rae ya demostró gran madurez.
La tercera temporada de Insecure ha puesto sus cartas sobre la mesa y parece una apuesta ganadora. Esta es la serie que necesitábamos este verano.
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Notas al margen:
- Después de Conjugal Visits en la primera temporada, y la gloriosa serie sobre esclavitud, Due North, en la segunda, la serie ficticia que ven los personajes de Insecure en la tercera es Kev‘yn’, una sitcom multicámara con la que quieren hacer homenaje y parodia de las series protagonizadas por negros en los años 90, a la vez que harán comentario social de la realidad de hoy.
La serie que ven los personajes de Insecure en la tercera temporada. (Fuente: HBO)
- La banda sonora de Insecure es una parte importante de la identidad de la serie en la que Issa Rae colabora como curadora junto a Kier Lehman, el supervisor musical. Para esta temporada se asociaron con el sello RCA y el Afropunk festival para elegir (al menos) un tema de un grupo desconocido e independiente que se incluirá en alguno de los próximos episodios. El concurso se lanzó el pasado mes de mayo en Twitter con el hashtag #InsecureTracksContest y se recibieron 6000 candidaturas.
- Después de cada episodio de Insecure, HBO emite y publica en su canal de YouTube, los vídeos Wine Down con Issa, en los que en cinco minutos, y acompañados de una copa, Issa conversa con miembros del cast o del equipo técnico sobre lo que ha ocurrido en la serie esa semana. En el primero de esta temporada la acompañan Yvonne Orji, que interpreta a Molly, y Prentice Penny, el showrunner de la serie.
Los nuevos episodios de ‘Insecure’ están disponibles los lunes en HBO España.
