Laura Dern, en ‘Big Little Lies’. (Fuente: HBO)
El último par de años ha sido muy destacable para Laura Dern. Su participación en Big Little Lies como Renata Klein, la CEO que no pide disculpas por ser rica e influyente, no sólo le ha reportado un Emmy en 2017 y un Globo de Oro en 2018, sino que ha elevado su perfil desde la actriz que siempre brillaba en papeles secundarios, o en películas independientes con cierto renombre, a la que el gran público conoce y celebra como propio su Oscar a la mejor secundaria por Historia de un matrimonio.
Dern es toda una institución en Hollywood. Hija de los actores Bruce Dern y Diane Ladd, sus primeros trabajos con David Lynch (Terciopelo azul y Corazón salvaje) la convirtieron en una musa indie que, en 1993, daba el salto a lo más mainstream con Parque jurásico. Incluso así, nunca perdió ese aura que Lynch le había dado, pero los 90 también fueron la época en la que la actriz se encontró, de repente, en la “lista negra” de Hollywood por haberse atrevido a hacer un pequeño papel en la sitcom Ellen.
Su Oscar ha llevado estos días a que se recuerden las consecuencias que The puppy episode, el capítulo en cuestión de la serie, tuvo para ella: algo más de un año en el que no recibió ninguna oferta de trabajo.
La salida del armario de ‘Ellen’
Ellen era el vehículo estelar para Ellen DeGeneres, humorista que se encontraba en pleno ascenso a la cima. Entre 1994 y 1998, su sitcom la mostraba como la dueña de una librería que lidiaba con lo que iba pasando en su vida de la mejor forma que podía, y con el apoyo de sus amigos. Al principio de la serie, Ellen tuvo varios intereses amorosos masculinos, pero ninguno funcionaba y, en general, la comedia tenía éxito, pero era bastante genérica. En 1997, DeGeneres decidió que su personaje tenía que asumir, y decir en voz alta, que era lesbiana, una declaración que ella misma estaba preparada para hacer en la vida real. En un reportaje de Time por el 20º aniversario de la emisión del capítulo, la humorista afirmaba que lo había hecho porque la serie necesitaba tener un punto de vista claro y definido con urgencia.
Laura Dern (derecha), en ‘Ellen’.
En su cadena, ABC, la idea no gustó. Los 90 eran la época del “no preguntes, no lo cuentes” y tenían miedo de que ese episodio dañara la audiencia de la serie y la envolviera en una polémica perjudicial para sus intereses. Le llegaron a decir a Ellen que, si querían provocar un cambio en su vida, que se comprara un cachorrillo, pero que no dijera que era lesbiana.
The puppy episode (de ahí su título) enseñaba a Ellen dándose cuenta de que era gay al conocer a Susan, una productora de televisión lesbiana. Se pasa todo el capítulo dándole vueltas a si de verdad se siente atraída por ella hasta que, en la escena más famosa, reconoce que es lesbiana por la megafonía de un aeropuerto. Fue toda una revolución en la televisión estadounidense, pero también tuvo sus consecuencias, más allá de que Ellen fue cancelada en la temporada siguiente, la quinta.
Los años en el limbo de Laura Dern
En 1997, Dern estaba disfrutando del mayor reconocimiento público que le había dado Parque jurásico, pero no dejaba de lado los proyectos controvertidos. Un año antes había estrenado Citizen Ruth, una película de Alexander Payne en la que era una mujer, embarazada de pocas semanas, que se veía en medio de un acalorado debate sobre el aborto, y también había sido la narradora de Bastard out of Carolina, el muy polémico debut tras las cámaras de Anjelica Huston, una historia de abusos y malos tratos que levantó ampollas.
La actriz siempre se ha mostrado muy comprometida con asuntos de relevancia social, así que no era extraño que se prestara a interpretar a Susan en Ellen. Para lo que no estaba preparada era para que dejaran de llegarle ofertas de Hollywood: “estaba haciendo películas independientes exitosas, y solo meses antes estaba en Parque Jurásico, la película más exitosa de la historia. Me ofrecían el oro y el moro y simplemente paró. Lo cual es bastante fuerte”.
Laura Dern, en ‘Inland Empire’.
Las tv movies y apariciones puntuales en El show de Larry Sanders fueron los trabajos de Dern hasta 2000 (más Cielo de octubre, una pequeña película con Jake Gyllenhaal que acabó convertida en un relativo éxito sorpresa). Allí fue regresando poco a poco a producciones de los grandes estudios, pero siempre en roles reducidos, incluso cuando volvió a ser la doctora Ellie Satler en Parque jurásico III. Sería David Lynch quien la rescataría definitivamente en 2006, con Inland Empire, pero fue tal fracaso crítico y comercial, que casi habría que esperar cinco años más para asistir al punto de origen del buen momento actual de la actriz. Y llegaría con una serie para HBO, Iluminada.
‘Iluminada’, el inicio del “Dernaissance”
Poco después de Inland Empire, Laura Dern empezó a trabajar con el guionista y director Mike White en el proyecto que marcaría su regreso definitivo al primer plano. Iluminada, estrenada en HBO en 2011, seguía a Amy Jellicoe, una ejecutiva que un día, en el trabajo, sufría una crisis nerviosa. En el tratamiento que sigue para recuperarse tiene, de pronto, una epifanía y decide que, a partir de ahora, se va a esforzar por ser mejor persona y, sobre todo, por apartarse de los comportamientos autodestructivos que había seguido hasta ese momento.
La serie era una comedia, sí, pero tenía un tono muy suyo. Amy podía ser, a veces, muy irritante, pero también resultaba encomiable ver cómo Dern y White querían explorar a fondo lo que significaba para ella ser una buena persona, y cómo afectaba a lo que la rodeaban, desde sus compañeros de trabajo hasta su madre (a la que interpretaba Diane Ladd).
‘Iluminada’. (Fuente: HBO)
Iluminada tardó en ganarse la confianza de la crítica, que al principio no sabía muy bien cómo tomársela. La segunda temporada, que acabó siendo la última, vio cómo Laura Dern ganaba un Globo de Oro por su papel y era nominada al Emmy en 2012, y terminó siendo más un título de culto. Sí allanó el camino para que, varios años más tarde, la actriz hasta se quedara con uno de los mejores momentos de Star Wars. Los últimos jedi. Y para que se reuniera con Lynch en Twin Peaks: The Return.
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