Imagen de la serie de ‘The Purge’, serie de USA. (Fuente: USA)
En 2009, una pequeña película de terror, que había costado 15.000 dólares, sorprendía a propios extraños al recaudar, sólo en Estados Unidos, más de 100 millones de dólares y acabar el año como la 30º película en taquilla, por delante de títulos como Watchmen, Julie & Julia o Tiana y el sapo. Aquella película era Paranormal Activity y era la quinta producción de Blumhouse, compañía fundada en el año 2000 por un antiguo ejecutivo de Miramax llamado Jason Blum.
Desde entonces, la productora no ha dejado de encadenar un éxito tras otro, y no sólo en cuanto a recaudación. Dos de sus títulos, Whiplash y Déjame salir, consiguieron estar nominadas al Oscar a la mejor película, y entre Insidious, The Purge y Sinister, ha logrado tres de las sagas de terror más lucrativas del género actualmente. Y Blumhouse no se queda sólo en la gran pantalla; su objetivo es producir contenido que vaya a ser visto, da lo mismo que sea en cine, en televisión o en un servicio de VOD. Es en la pequeña pantalla donde sus últimos proyectos están llamando más la atención en estos meses.
Lo ha hecho, sobre todo, a través de Heridas abiertas, que también ejemplifica la manera en la que la empresa afronta estas historias de género. “Creo que siempre le decepcionó que los dramas no pudieran tener mayores audiencias”, explicaba a The Ringer Couper Samuelson, uno de los ejecutivos de Blumhouse, sobre el fundador: “De una manera extraña, producir esas películas independientemente, como si fueran dramas, pero haciéndolas para una audiencia masiva, como Insidious o la primera Paranormal Activity, era su manera de cumplir ese deseo”.
Chris Messina y Amy Adams, en ‘Heridas abiertas’. (Fuente: HBO España)
Ésa es una de las marcas de la casa de Blumhouse, que sus cintas de terror sean, en el fondo, dramas sociales o familiares, o sobre personas lidiando con graves traumas, con el envoltorio de historias de fantasmas, posesiones o asesinos psicópatas. La otra gran característica de sus producciones es que tienen todas un presupuesto muy ajustado. Déjame salir, por ejemplo, costó 4,5 millones de dólares (recaudó 255 en Estados Unidos) y la primera The Purge ni siquiera llegó a ese presupuesto.
El modo en el que Blumhouse opera en el cine es ya bien conocido, y lo explicó el propio Jason Blum en la mesa redonda de The Hollywood Reporter dedicada a los productores de cara a los pasados Oscar: “rodamos las películas en 21 días y no nos llevamos cuota de productores”. Pero su interés por la televisión no estaba siendo tan publicitado y, además de seguir el mismo eclecticismo que las producciones para la gran pantalla (Blum ha puesto en pie también la ya mencionada Whiplash, Múltiple y hasta la última película de Spike Lee, BlacKkKlansman), empieza a apuntar a que va ser casi tan importante.
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Las series de Blumhouse
Realmente, la productora lleva haciendo series desde muy poco después de Paranormal Activity. El director de aquella película, Oren Peli, era el cocreador de The River, una serie que ABC estrenó en 2012 y que se servía del found footage para contar la historia de una expedición por el Amazonas que buscaba a un aventurero televisivo estadounidense desaparecido allí. Ésa fue la primera producción de Blumhouse para la pequeña pantalla, y aunque acabó cancelada, abrió la puerta para que la empresa diversificara aún más su su lanzamiento de contenido.
Robert Durst era el centro de la docuserie ‘The Jinx’. (Fuente: HBO)
A The River la siguieron, entre otras, el thriller Eye Candy para MTV, la comedia de terror 12 deadly days para YouTube, la miniserie de ciencia ficción Ascensión para Syfy y hasta la docuserie The Jinx para HBO, uno de los grandes éxitos de la reciente obsesión por el true crime en la televisión norteamericana. Con la excepción de ésta última, ninguna consiguió reproducir la buena racha de las producciones de Blumhouse en el cine, pero sí fueron preparando el terreno para el renovado interés de la compañía en la pequeña pantalla para los próximos meses.
Además de Heridas abiertas, el próximo gran estreno es la serie de The Purge, que llegará el 4 de septiembre a USA Network y que expandirá el mundo de esa saga de películas sobre una noche al año en la que no hay leyes y está permitido cometer todo tipo de crímenes y actos horribles. Es el título más asociado a la marca Blumhouse, por lo que su rendimiento se unirá más al estudio que cualquiera de sus otras producciones. Y tiene unas cuantas listas para su estreno para este año.
El 24 de agosto, por ejemplo, se estrena en Netflix Gul, que es además una de las series que la plataforma ha producido en la India, y el 5 de octubre se estrenará en Hulu la antología Into the dark. A finales de julio también se vio otra serie antológica, en este caso para Facebook Watch, titulada Sacred tales.
En desarrollo se encuentran una nueva versión de Temblores y, siguiendo con ese eclecticismo característico de Blumhouse, también una adaptación, a cargo de Ethan Hawke, de la novela The good Lord Bird, sobre el conocido abolicionista John Brown, que abogaba por una insurrección armada para acabar con la esclavitud.
La productora ha lanzado también una editorial, una cadena de podcasts y continúa con sus películas de bajo-medio presupuesto, que son las que la han puesto en el mapa. La emisión de Heridas abiertas en HBO ha hecho que todavía más gente sepa quién es Jason Blum y, además, ha añadido su nombre a esa televisión de prestigio que gana premios Emmy y que los críticos diseccionan semana a semana.
‘Heridas abiertas’ está disponible todos los lunes en HBO España. ‘Gul’ se estrena el 24 de agosto en Netflix España.
