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Crítica: ‘Heathers’ es demasiado autoconsciente

Los protagonistas de ‘Heathers’. (Fuente: HBO España)

ACTUALIZACIÓN: El estreno de ‘Heathers’ en HBO España está aplazado hasta que Paramount, su cadena en Estados Unidos, anuncie la nueva fecha en la que se verá la serie. Ayer hizo público que la retrasaba por las repercusiones que el tiroteo en un instituto de Parkland (Florida) están teniendo en la sociedad estadounidense. No hay, de momento, una previsión de cuándo se estrenará ‘Heathers’, más allá de la promesa de “más tarde este año” hecha por la cadena.

El género teen es un clásico en la televisión. Las tribulaciones de los adolescentes que están desarrollando su personalidad, que dejan atrás la infancia y empiezan a adentrarse en los rigores de la vida adulta, que viven todas sus emociones muy intensamente y que juzgan muy severamente a sus compañeros de clase son demasiado atractivas para que los guionistas no vuelvan a ellas una y otra vez. Un viaje de descubrimiento personal es muy goloso como para dejarlo escapar.

Siempre ha habido, además, evoluciones diversas de estas series de instituto. Veronica Mars le añadió un toque noir, Glee era una serie musical, Por trece razones tocaba un asunto importante como el suicidio adolescente, Skins apostaba por el realismo, Marvel’s Runaways, por los superpoderes, y algo como Dawson crece quería presentar una imagen de los adolescentes más aspiracional, con protagonistas haciendo referencias pop que los chavales de finales de los 90 no harían de forma habitual.

El instituto puede utilizarse, además, como un microcosmos de la sociedad del momento. A través de sus alumnos y sus profesores es posible criticar las peores tendencias de la época, que puede ser la superficialidad extrema que preside la búsqueda de la popularidad a través de las redes sociales. Por ahí quiere moverse Heathers, la serie de Paramount Network que adapta todo un clásico de culto como Escuela de jóvenes asesinos, y que HBO España estrenará el próximo viernes 8.

La premisa de la serie busca llevar más allá la típica historia de chicas populares y malas que martirizan al resto del instituto mezclándola con un intento de asesinato de Heather Chandler, la líder del grupo. Y con un chico que quizás es un poco psicópata y por el que enseguida se siente atraída Veronica, la protagonista, que oscila entre ser la popular que va con las Heathers o seguir con su amiga de siempre, Betty.

Este punto de partida fue una pequeña revolución en el cine juvenil de los 80, pero en las series teen de 2018 no basta con eso para llamar la atención. Los responsables de Heathers lo saben, así que añaden los giros de que Heather Chandler sea una chica grande, a la que en cualquier otro instituto estarían llamando “gorda” a todas horas, y que las otras Heathers sea una afroamericana y un chico queer de género fluido, saliéndose del molde de las blancas pijas de la película. ¿Es eso suficiente para darle otro aire al remake?

El ‘teen noir’, la nueva moda en series juveniles
‘Por trece razones’ o ‘Riverdale’ son ejemplos de esta tendenciafueradeseries.com

Realmente, no. La serie tiene que destacar también entre un océano de historias de instituto que han tirado del sarcasmo y la sátira para distinguirse, y el primer episodio de Heathers acaba siendo demasiado autoconsciente. Fuerza tanto el cinismo de sus personajes, su entrega absoluta a los comportamientos más narcisistas, que no logra que su propuesta funcione.

Jasmine Matthews, Melanie Field y Brendan Scannell son las Heathers del título.

Scream Queens ya hizo lo mismo que se propone esta serie (con resultados desiguales) y en Awkward, Sadie era un precedente de esta Heather que resultaba, por ahora, mucho más divertida. Llegar de las últimas a las sátiras y comedias negras de instituto obliga a Heathers a ofrecer un extra que, en su arranque, no ha encontrado. Y JD, el chico misterioso que arrastra a Veronica a la espiral de violencia de la película, resulta demasiado cargante; le gusta excesivamente escuchar su propia voz.

La serie se presenta sabiendo cómo llevar más allá el concepto no sólo de su propio material de partida, sino de otras referencias como Chicas malas o Rumores y mentiras. Su problema es que, de inicio, se ve prefabricado, forzado. Heather es ofensiva, sí, pero también debería ser divertida, una Chanel Oberlin aumentada y mejorada. Aún hay margen de evolución.

‘Heathers’ se estrenará en HBO España.

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