Nicole Kidman y Reese Witherspoon, en la primera temporada de ‘Big little lies’. (Fuente: HBO España)
Tras meses de rumores, HBO ha hecho oficial finalmente que Big little lies tendrá segunda temporada. Lo que al principio era una miniserie no sólo fue de las triunfadoras en los pasados Emmy, sino que representó también uno de los primeros fenómenos del año, con una audiencia que fue creciendo episodio a episodio y una gran visibilidad mediática. Prácticamente se daba por seguro que HBO intentaría revivir la serie, y así ha sido al final.
Según informan medios como The Hollywood Reporter, el principal obstáculo para la renovación era contratar de nuevo a sus actores y, sobre todo, a Nicole Kidman y Reese Witherspoon, que también eran productoras y que fueron las principales impulsoras del proyecto. También se ha tardado más de lo previsto en hacer oficial la noticia porque se estaba buscando un director que sustituyera a Jean-Marc Vallée; la elegida ha sido finalmente Andrea Arnold (American Honey).
David E. Kelley regresa para escribir los siete episodios de esa segunda temporada, que se basarán en una historia de Liane Moriarty, autora del libro original de Big little lies. Casey Bloys, jefe de programación de HBO, explicó a Vulture que la decisión de aprobar una segunda temporada pasó del escepticismo inicial de continuar la historia a ver cómo podían trabajar todos juntos de nuevo: “no empezamos pensando “debemos hacerlo”. Todo el mundo está muy ocupado. Reese y Nicole tienen demasiado trabajo. Todos los implicados están en la cima haciendo otras cosas. Nadie tenía que hacerlo, así que todos tenían que sentirse bien. Rese y Nicole no son productoras de pega. Están metidas en esto, en la sconversaciones. Creo que empezamos en ‘queremos volver a trabajar juntos otra vez. ¿Hay más aquí? ¿Hay algo más que queramos hacer?’. Nació de la sensación de ‘éste es un buen grupo, ¿qué podemos hacer?’. Fue paso a paso”.
La segunda temporada de Big little lies no se verá, de todos modos, hasta 2019. Y esta renovación ya ha generado controversia por la categorización del título en los próximos premios. HBO no la anunció hasta después de que se cerraran los periodos de votación de Critics’ Choice y Globos de Oro, donde competirá como miniserie, mientras el sindicato de productores (PGA) la ha situado como drama.