(Fuente: Amazon Prime Video)
Esta crítica se ha escrito después de ver la temporada 2 de ‘Fleabag’ y no contiene spoilers.
Pocas series pueden volver después de un largo receso y mantener las expectativas tan o más altas que desde la última vez que las vimos. Una de ellas fue Juego de tronos, que regresó después de dos años; la otra es Fleabag, que lo hizo después de tres años y mejor que nunca.
Phoebe Waller-Bridge ya está en nuestros altares, en los de la industria y en los de sus colegas de profesión, y Fleabag es su obra más personal, la que tiene su sello autoral. Después del alto nivel que tuvo en su primera temporada y después de Killing Eve, solo podíamos esperar buenas cosas de esta nueva entrega, pero lo que hemos recibido no solo es muy bueno, es excepcional.
Catalogar las series como obras maestras es algo que incomoda a muchos, quizá porque no consideran que el formato televisivo pueda equipararse al arte, o porque no comulgan con los superlativos, pero Fleabag lo es y su cierre no pudo ser más perfecto.
El primer episodio de esta segunda y última temporada es un ejercicio de guion, dirección e interpretación magistrales. Un episodio embotellado, porque se desarrolla en un solo espacio, pero también está encapsulado temporalmente, porque sigue una cena familiar en tiempo real.
(Fuente: Amazon Prime Video)
La introducción a la temporada de despedida de la serie no se podía haber planteado de mejor manera; reúne a los personajes principales alrededor de una mesa, nos recuerda las dinámicas de sus relaciones desde la última vez que los vimos, nos dice en qué punto emocional están ahora, nos presenta al personaje que interpreta Andrew Scott y ubica en su centro a Fleabag y a su hermana Claire. Además, es divertidísimo y lo pone todo en marcha; nada de lo que allí ocurre es accesorio.
Si queréis más alicientes, vuelve Olivia Colman, tenéis a Fiona Shaw y Kristin Scott Thomas como estrellas invitadas, un juego distinto con el recurso de ruptura de la cuarta pared, que encuentra su culmen en el último plano del quinto episodio, y un final precioso y absolutamente perfecto en todos los sentidos. Es lo que el personaje y nosotros necesitábamos a nivel emocional.
Cuando hicimos hace unas semanas un FDS Opina dedicado a los mejores finales de series aún no podía incluir este, pero el de Fleabag es, desde ahora, mi final preferido y su temporada la convierte en una de las series del año.
Gracias, Fleabag, te echaremos de menos.
‘Fleabag’ está disponible en Amazon Prime Video.
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