Stephen Dorff, Mahersahala Ali y Brandon Flynn, en la tercera temporada de ‘True Detective’. (Fuente: HBO España)
Que algunos casos reales han servido de inspiración a Nic Pizzolatto para escribir las temporadas de True Detective es algo conocido. El Rey Amarillo de la primera tenía sus raíces en un escándalo de abusos sexuales a niños y rituales satánicos en una iglesia de Louisiana a principios de los 2000, y en la tercera hay más historias cuyos rastros es posible encontrar en los tres episodios emitidos hasta ahora.
La combinación de entorno rural y niños, más los sospechosos iniciales, llevan a recordar al menos cuatro casos bastante mediáticos en Estados Unidos. De alguno de ellos, de hecho, se han producido varios documentales y hasta películas, y no sería extraño que hubieran inspirado esta tercera entrega de True Detective.
Los “Tres de West Memphis”
La historia a la que más recuerda el principio del caso Purcell es a la de Damien Echols, Jason Baldwin y Jessie Misskelley, conocidos como los “tres de West Memphis”. En 1993, siendo adolescentes, fueron acusados de haber secuestrado, mutilado y asesinado a Steve Branch, Michael Moore y Christopher Byers, tres niños de ocho años en un pequeño pueblo de Arkansas llamado West Memphis.
Sus cadáveres fueron encontrados un día más tarde de su desaparición, en la orilla de un río, y los policías determinaron inicialmente que habían sufrido abusos sexuales y que sus heridas correspondían a algún tipo de ritual. Eso se unió a que se interrogó a Echols porque había manifestado cierto interés por el ocultismo y le gustaba el heavy metal, y se acabó logrando una confesión de los tres chicos que fue la base de sus juicios y sus condenas.
Sin embargo, había voces que criticaban la manera en la que se había llevado a cabo la investigación y que se había permitido que una repentina alarma social sobre el ocultismo y los cultos satánicos determinara el veredicto de los juicios. Hubo varios documentales que intentaban demostrar la inocencia de los “tres de West Memphis” (la trilogía Paraíso perdido y, más recientemente, West of Memphis) y finalmente, en 2011, consiguieron quedar libres al comprobarse que el ADN encontrado en los tres niños no correspondía con el suyo.
El escenario de los crímenes, la presencia de tres adolescentes a los que Hays y West interrogan casi los primeros, que la familia del acusado de la muerte de Will Purcell quiera apelar años más tarde porque considera que es inocente, que se esté produciendo un documental, años más tarde, que intente averiguar la verdad… Todos esos detalles en los primeros episodios de la tercera de True Detective recuerdan a este caso, uno de los más famosos de la historia reciente de Estados Unidos.
Jacob Wetterling
En 1989, Jacob Wetterling fue secuestrado mientras volvía a casa, en un pueblo de Minnesota, en su bicicleta con su hermano y un amigo. El secuestrador dejó que los otros dos chicos escaparan, pero se llevó a Jacob, de 11 años. Durante casi treinta años, la policía fue incapaz de resolver el misterio y, en 2016, un grupo de periodistas lanzó un podcast, In the dark, para contar la historia de uno de los casos sin resolver más mediáticos.
No les dio tiempo a terminar la temporada antes de que Danny Heinrich fuera acusado del secuestro y el asesinato del niño, cuyos restos se encontraron a 48 kilómetros de donde había sido raptado. Heinrich había sido interrogado en 1989 y había sido también sospechoso en el ataque a otro niño nueve meses antes del caso Wetterling, pero nunca fue arrestado.
Wayne Hays, entrevistado en 2015 por la directora del documental sobre los Purcell. (Fuente: HBO España).
Las conexiones con la serie de HBO están en esos más de veinte años sin respuestas reales al misterio y en esa búsqueda de dichas respuestas por parte de unos periodistas que, en este caso, desvelaron una mala investigación inicial llena de errores.
Jaycee Dugard
Al final del primer capítulo de la nueva temporada se sabe que Julie Purcell podría estar viva una década después de su desaparición. Esto lleva a pensar en uno de los secuestros más mediáticos del país, el de Jaycee Dugard, de 11 años, de una calle cercana a su casa en California, en 1991. Philip Garrido y su esposa, Nancy, fueron detenidos en 2009 cuando acudieron al campus de la universidad de Berkeley con dos niñas y su comportamiento levantó sospechas. Las niñas eran hijas de Dugard, que había estado en cautiverio durante 18 años.
Los libros de Mara Leveritt
Amelia Reardon, la mujer de Wayne Hays, escribe un libro sobre el caso Purcell a partir de su propia investigación. Su figura podría basarse en bastantes escritoras de true crime (incluida Michelle McNamara, esposa de Patton Oswalt, que estuvo años detrás de la pista del llamado “asesino de Golden State”), pero es más que probable que esté inspirada en Mara Leveritt, periodista que siguió de cerca el caso de los “tres de West Memphis” y que escribió un libro sobre todas las dudas que había acerca de las condenas de Echols, Baldwin y Misskelley.
Devil’s Knot llegó a convertirse en película, con Reese Witherspoon y Colin Firth, y Leveritt contaría después la historia de Don Henry y Kevin Ives, dos adolescentes de otro pueblo de Arkansas que fueron arrollados por un tren en 1987. Estaban tumbados sobre las vías con las manos en el pecho, y aunque sus muertes fueron archivadas como accidentes en un principio, sus familias lograron que el caso se reabriera cinco meses más tarde.
Entonces, los policías llegaron a la conclusión de que habían sido asesinados y, después, colocados sobre las vías, pero nunca se detuvo a ningún sospechoso. El libro de Leveritt sobre ese caso se titula The boys on the tracks.
En esto se parecen la tercera temporada de ‘True Detective’ y la primera
La sombra de Rust Cohle y Martin Hart es alargada en el caso que investiga Wayne Haysfueradeseries.com
La tercera temporada de ‘True Detective’ está disponible los lunes en HBO España y Movistar+.