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Leonardo Sbaraglia y Cesc Gay presentan el humor y la inocencia de ‘Félix’

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Leonardo Sbaraglia y Cesc Gay, protagonista y creador de ‘Félix’. (Fuente: Gabriel de la Morena/Movistar+)

Cesc Gay se pasó toda la promoción de Truman y los meses que transcurrieron entre la Concha de Plata a sus dos actores, Ricardo Darín y Javier Cámara, en el festival de San Sebastián y los cinco Goya que la película ganó en 2016 pensando en Félix, un escritor y profesor de literatura argentino que vive en Andorra, que pasa tres días maravillosos con una mujer a la que acaba de conocer y que, después, se obsesiona con buscarla. Porque esa mujer desaparece y Félix no consigue que nadie lo tome en serio.

El director y guionista lo reconoce en un encuentro con la prensa previo al estreno de la serie que protagoniza ese escritor argentino, Félix, que podrá verse al completo, bajo demanda, mañana en Movistar+. En la charla también participa el protagonista principal de la serie, Leonardo Sbaraglia, que se reencuentra con Gay seis años después de trabajar juntos en la película Una pistola en cada mano, y que fue también la primera opción para dar vida a Félix.

“Estos días he estado pensando en que ya había algo de Félix en el personaje que hizo Leo en Una pistola en cada mano. Había algo de ese personaje muy frágil, más sentido y que salía angustiado de un ascensor. Sentí que había un vínculo en el fondo”, apunta Gay, pero aunque él lo veía claro desde el principio, convencer a Sbaraglia no fue sencillo. El actor se había propuesto no moverse en todo el año de Argentina: “estaba trabajando en Uruguay, en Montevideo, haciendo la segunda temporada de El hipnotizador. Estaba cansado de estar fuera de casa y tomé la decisión de decir “el año que viene estoy en Buenos Aires todo el año”. Sin embargo, la propuesta de Félix le atrajo lo suficiente para posponer su decisión, y también pesó la oportunidad de trabajar de nuevo con Gay: “si hubiese sido otro director, no sé si me hubiera metido en esto”.

Leonardo Sbaraglia, Cesc Gay y Pere Arquillué, durante el rodaje de ‘Félix’. (Fuente: Movistar+)

La serie es un thriller que gira alrededor de esa búsqueda de Julia y de cómo Félix va adentrándose en una historia que le supera completamente y para la que no está, ni de lejos, preparado. Su personalidad es la que marca el tono de los episodios y ahí puede llegar la primera sorpresa para el espectador porque podría decirse que es un thriller cómico. Y es un tono que ya estaba claro desde la concepción misma de Félix. “Nació así ya”, explica Cesc Gay, que afirma que se inspiró en algunas películas de Alfred Hitchcock en las que hombres corrientes se encontraban perdidos en tramas muy peligrosas y, también, en los hermanos Coen.

De hecho, la comparación con Fargo es un poco inevitable porque Félix también ha querido aprovechar la atmósfera que dan las montañas nevadas y que la nieve casi sea un personaje más. El director afirma que “quería rodar en Andorra, quería la montaña, quería un paraíso fiscal, quería fronteras, quería gente que esconde dinero… Me pareció un lugar fantástico. Es verdad que podríamos haber rodado en verano, pero la nieve es interesante, me gustó”.

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La nieve es otro obstáculo más de los que Félix se encuentra en una búsqueda en la que él adquiere a veces ciertos tintes quijotescos. Para Sbaraglia, “todo el mundo cree en algún momento que Félix ve molinos de viento, cuando en realidad está viendo cosas de verdad. Y el personaje de Pere es tan Sancho Panza…”. Todo eso forma parte del humor que le han querido imprimir a la serie, y que al principio resultaba un poco complicado de comprender.

Una imagen de ‘Félix’. (Fuente: Víctor Bello/Movistar+)

Al menos, su protagonista reconoce que el tono de serie y personaje fue de los aspectos que más le costó: “nosotros nos juntamos con Cesc un mes antes de rodar y leímos todos los capítulos, y ahí fui entendiendo mucho el tono que él quería. Yo, a priori, leyendo los guiones no entendía tanto la claridad que él tenía en relación a cómo contar ese personaje y, sobre todo, el humor que quería darle y esa transparencia. Una de las primeras cosas que hablamos, no sé si de pronto empezamos a hablar de mujeres, y me debió salir una cara un poco de galán, no lo sé, y Cesc me dijo “eso no lo puede tener nunca Félix”. No tenía nada de seducción y en ningún momento se siente lindo”. Y añade: “me ayudó mucho fue la idea de estar todo el tiempo un poco incómodo, como si el personaje estuviera todo el tiempo resbalándose”.

El tono es lo que más destaca de los seis capítulos que componen Félix, un tono que se mantiene mientras se va desenredando una trama de crimen organizado más compleja de lo que parece a simple vista, y que aunque podría continuar en una segunda entrega, “es una temporada cerrada, que eso era lo importante”, afirma Cesc Gay.

‘Félix’ se estrena mañana, completa bajo demanda, en Movistar+.

marina

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