Little Voice, la serie musical de Apple TV+, se puede describir como si Felicity se fuera a Nueva York no siguiendo al chico del que está enamorada, sino para triunfar como cantautora. Bess (Brittany O’Grady) nos introduce en la escena más local de la música neoyorquina, la de los aspirantes a conseguir un buen contrato con una discográfica o, simplemente, a tocar en sitios más grandes que el bar en el que también trabajan como camareros.
Parte de las peripecias de Bess le han ocurrido a una de sus dos creadoras, Sara Bareilles, que aporta las canciones a la serie. De hecho, la que suena en los créditos y le da título, Little Voice, hasta fue un poco la inspiración para Bareilles y Jessie Nelson a la hora de crear la ficción. La cantante la descartó de la lista de temas de su primer disco porque a los ejecutivos del sello no les convencía, y ha acabado teniendo una segunda vida gracias a la televisión.
El dúo detrás de la serie ya había colaborado con anterioridad en el musical Waitress, una adaptación de la película La camarera que hizo muy conocida a Bareilles fuera de su público habitual gracias al gran clímax emocional de la obra, la canción She used to be mine, que se ha convertido en favorita de concursantes de talent shows y que sonó esta misma temporada en Katy Keene.
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