Leticia Dolera, Aixa Villagrán y Celia Freijeiro, en ‘Vida perfecta’. (Fuente: Movistar+)
Si unimos el título original que tenía esta comedia, Déjate llevar, con el actual, Vida perfecta, se compone un resumen de la serie bastante acertado. La creación de Leticia Dolera tiene en su centro a tres mujeres que se encuentran en diferentes encrucijadas de sus vidas. María (Leticia Dolera) tiene planificada desde que era niña toda su existencia: buen marido, buena casa, hijos. Apenas se sale de sus planes, lo que termina provocando que descarrilen. Su hermana Esther (Aixa Villagrán) es una artista que vive a su aire, y a la que todo el mundo insiste en que dé un paso adelante para que sus obras se vendan, y su mejor amiga, Cristina, tiene esa vida que María ansía, pero de la que ella quiere escapar.
A raíz de algo que le ocurre a María por seguir el consejo de su hermana y dejarse llevar, las tres se ven abocadas a replantearse el concepto de “vida perfecta” que soñaban para sí, o el que los demás les dicen que están disfrutando. María es la que debe hacer un ajuste mayor, pero ninguna se libra de tener que reconocer que están evitando tomar decisiones que implicarían dar un giro drástico a sus existencias.
Dicho así, parece que Vida perfecta es casi un drama existencialista, pero no es el caso. Dolera y Manuel Burque, que son los guionistas, imprimen un tono más cercano a las comedias de autor que tan de moda se han puesto en los últimos años, con personajes que meten la pata sin querer y algún que otro toque escatológico. Consiguen manejar razonablemente bien el detonante del viaje de María, que es un campo de minas, y construyen, sobre todo, a Esther y Cristina como mujeres con entidad propia a las que quieres ver a menudo.
La polémica que acompañó a la serie cuando estaba rodándose puede colorear las opiniones preconcebidas que algunos espectadores tengan sobre ella. Ha pasado el suficiente tiempo como para que se pueda juzgar Vida perfecta por lo que vemos en pantalla, y lo que se ve es una exploración con cariño de tres mujeres intentando encontrar sus caminos en unos momentos de su vida en los que ésta, en teoría, debería estar bien clara y asentada.
Hay humor, hay cierto tacto al acometer algunos aspectos espinosos y hay tres actrices que están realmente bien. Sí, las tres habitan un entorno socioeconómico muy concreto y, a veces, pueden ser un poco irritantes. Pero merece la pena echar un vistazo a sus dudas vitales porque es bastante fácil identificarse con muchas de ellas.
‘Vida perfecta’ se estrena el 18 de octubre en Movistar+.
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