Buscar
Buscar

‘Ratched’ no es la historia de origen de una villana que esperas

Sarah Paulson y Cynthia Nixon, en ‘Ratched’. (Fuente: Saeed Adyani/Netflix)

Los junkets de prensa por videoconferencia, tan populares en estos tiempos de cuarentenas y restricciones de viajes por el coronavirus, tienen el mismo glamour que los que se hacían habitualmente en hoteles de lujo, es decir, poco. Sin embargo, entrevistar a una Sharon Stone toda divina o a una Sarah Paulson que bromea durante los 15 minutos de mesa redonda (nos saluda diciendo que “si Sharon Stone te manda un mensaje, tienes que contestar, esto es así”) tiene su aquél incluso aunque sea a través de la pantalla de un portátil.

Las dos actrices, más Cynthia Nixon y Sophie Okonedo, hablan con la prensa europea (y con Fuera de Series) en una maratoniana jornada de enlaces de Zoom y las mismas preguntas repetidas una y otra vez (y respondidas todas con solvencia, y hasta con su toque de humor por parte de Paulson) para presentar Ratched, la serie con la que Ryan Murphy y el debutante Evan Romansky nos cuentan la historia de origen de la cruel enfermera de Alguien voló sobre el nido del cuco.

Para ello, la acción se va a finales de los años 40, al norte de California, y le da a Paulson una rara oportunidad de ser la protagonista total de la historia, aunque a su alrededor se muevan muchos otros personajes que van ganando relevancia con el paso de los capítulos. “No quería hacer este personaje”, reconoce la actriz: “Parecía una buena oportunidad para sufrir una humillación, pero lo que pasa con Ryan es que es muy persuasivo, y hablaba de una manera muy profunda sobre algunos de estos temas y del viaje que ella emprendería. No para de acudir a mí con estos extraordinarios papeles. ¿Cómo puedo decir que no?”

Su Mildred Ratched no es todavía la que Ken Kesey crearía en su libro y Milos Forman inmortalizaría en la película protagonizada por Jack Nicholson. Esta Mildred más joven acude a un hospital psiquiátrico en el pueblo de Lucía (California) con la esperanza de ser contratada allí como enfermera. El director del hospital se está ganando fama de utilizar los tratamientos más modernos en sus pacientes y, además, a Mildred le interesa estar cerca de un paciente en concreto.

Sharon Stone es uno de los grandes nombres en la serie. (Fuente: Saeed Adyani/Netflix)

“Cuando asumes un papel icónico, que creo que está en la lista del AFI de los mejores villanos de la historia del cine, es un precedente muy intimidatorio y asusta”, explica Paulson, que también es productora ejecutiva, sobre la perspectiva de meterse en la piel de Ratched, pero se dio cuenta de que esta versión del personaje está en proceso de convertirse en esa villana famosa y es alguien que va por la vida interpretando, asimismo, un papel, construyéndose una fachada muy cuidadosa y pulcra.

“Era la manera más evidente para reconocerla. Vi Alguien voló sobre el nido del cuco cuando era más joven y tuve la reacción tradicional de ‘es malvada, es cruel, es una aguafiestas’, todos esos pensamientos peyorativos. Al verla otra vez, cuando supe que iba a interpretarla, la vi de una manera muy diferente en relación a como creció Mildred. Ves que vive en una infraestructura patriarcal en la que no es capaz, ni es animada ni tiene el valor, de dar su opinión. La describo como calcificada. Es muy dura, no hay ni una parte de su vida que escape, no es porosa. Es sólida como una roca. Y pensé, ¿qué hace que alguien se vuelva así?”, explica.

Una característica que une a todos los personajes de la serie es que ocultan secretos que no quieren que salgan a la luz. Pueden estar relacionados con su pasado, con su identidad y con un tema que Ryan Murphy ha tratado ya en otras ocasiones, la marginación por razón de su orientación sexual. Cynthia Nixon da vida a la asesora del gobernador de California, que se interesará por el hospital por sus propios motivos, y afirma que “algo que todos los personajes tienen en común en Ratched es que guardan uno o varios secretos oscuros, ocultan partes de sí mismos que les han dicho que son inaceptables o están mal e intentan aplastar. Si piensas en los 50, está esta imagen de normalidad y su tiranía”.

Eso puede llevar a que los personajes se sientan completamente solos, que para Sarah Paulson fue la clave a la hora de acercarse a Mildred: “Conecté con rapidez con su soledad. Era algo que estaba muy claro en el guion y que me parecía que era la historia que predominaba internamente en Mildred, esa y absolverse por haber abandonado a la persona más importante de su vida. Todo lo que hace se encuentra en medio de esas cosas. Sí, hace cosas moralmente reprobables, pero cree que las hace por un motivo más o menos puro”.

Sophie Okonedo y Jon Jon Briones. (Fuente: Saeed Adyani/Netflix)

Y no es la única. El personaje de Sharon Stone, que debuta en el universo de Ryan Murphy, está movido por un deseo de venganza disfrazado de querer proteger a su familia y, ya desde su presentación, es uno de los más memorables de la serie. “Me sentía muy Norma Desmond bajando por las escaleras, pensaba ‘oh, realmente estoy lista para mi primer plano’”, afirma, añadiendo además que ella también ha caído bajo el influjo del productor: “Espero que me pida hacer otra, porque me encantó. Al principio no sabía qué estaba pasando porque no había hecho nada parecido antes, pero una vez que le pillé el truco, me gustó tanto, que de verdad espero que me invite a hacer más”.

La otra debutante en “Murphylandia” es Sophie Okonedo, que no hace acto de presencia hasta la mitad de la temporada, pero enseguida causa una notable impresión: “Estaba muy contenta de empezar así porque, desde el primer día, estaba dentro, estaba comprometida con todos esos personajes y ya no había vuelta atrás. Fue un bautismo de fuego”.

Cada episodio desvela una capa más de la personalidad de Mildred, que tendrá que enfrentarse a partes de sí misma que ni siquiera creía que estuvieran vivas, y también nos muestra algo más de cómo se concebía la psiquiatría en los años 50. Sharon Stone, que cuenta que su abuela trabajó como enfermera en un psiquiátrico más o menos durante aquella época, está de acuerdo con la prensa en que Ratched habla sobre el abuso de poder, un tema muy actual: “Lo que pasa actualmente con los abusos de poder es que la gente habla cada vez más sobre dónde ocurren. Solíamos decir que era incidental, pero ahora lo contamos más en la panorámica general, decimos que lo tuvimos como un tema de la vida. No es solo ‘ha pasado ahí y vamos a legislar un incidente’; ahora lo vemos como un estilo de vida, estamos hartos del abuso de poder como un estilo de vida”.

(Fuente: Saeed Adyani/Netflix)

Cynthia Nixon abunda sobre esa idea, pero la lleva a las diferencias existentes entre la serie y la película original, ancladas precisamente en quién tiene el poder y quién lucha contra él, o se ve oprimido por él. Explica que “cuando pienso en la película de Alguien voló sobre el nido del cuco, es una película sobre la contracultura y la enfermera Ratched es el establishment, y luchan contra eso. Al situar Ratched a finales de los 40 y principios de los 50, la contracultura casi no existía, así que todo el mundo toma parte en imponer la normalidad, pero ves cómo incluso la gente al cargo es también víctima de ello”.

La ubicación temporal en esa década acarrea además ciertas decisiones estilísticas que resultarán muy evidentes para muchos espectadores. Para Nixon lo fueron desde el momento en el que vio la primera temporada con su hijo: “Fue fascinante verlo todo terminado, y tengo que decir que, aunque sabía que iba a ser algo muy estilizado, no estaba preparada para cuánto. El germen de la idea es el personaje de Ratched, pero esa historia era un producto de los 60 y los 70, y ésta está más en la época de Vértigo y todas aquellas películas de Hitchcock en color”.

Lo que la serie consigue es construir, de una manera muy convincente, ese mundo aparentemente idílico y aspiracional en el que se mueve Mildred, un mundo repleto de dobles morales, sentimientos reprimidos y tácticas ciertamente brutales para “limar las asperezas” de todos los que no encajen en el ideal perfecto de sociedad. Acaba siendo un mundo tan inmersivo, que Sarah Paulson reconoce que le costó salir de él y regresar a su vida normal. “Treinta y seis horas después de acabar Ratched volé a Toronto a empezar Mrs. America, que claramente era un entorno muy diferente y un mundo muy diferente, aunque con gente que ya conocía y amigos con los que ya había trabajado, lo que fue estupendo”, cuenta: “Pero me desorientó dejar el mundo de Ratched que, si ves la serie completa, es un mundo de verdad, has atravesado la madriguera del conejo y estás en otro universo (…). Yo de verdad viví en él durante seis meses, nunca tuve un día libre”.

‘Ratched’ se estrena el 18 de septiembre en Netflix.

Further reading

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando, está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies. Pulse el enlace para más información. ACEPTAR

Aviso de cookies