Con una larga carrera a sus espladas, que ha serpenteado por películas como Círculo de amigos, El indomable Will Hunting o Hechizo del corazón y series como Sin palabras o Will & Grace, Minnie Driver llega hasta su último proyecto televisión en Amazon. La parada no es otra que un episodio de la segunda temporada de Modern Love, de los más destacados de esta tanda, titulado Carretera con curvas con la capota bajada. En él interpreta a Stephanie, una doctora muy querida por todo el pueblo, pero que pasa por estrecheces económicas y que tendrá que enfrentarse a la decisión de si vende un viejo coche que no para de estropearse, pero que le trae muy buenos recuerdos.
El capítulo que protagonizas no es la típica historia de amor sobre chico conoce a chica. ¿Qué es lo que más te gustó al leer el guion?
La historia trata sobre el amor y el dolor. Es una pareja casada tiene que vender un coche que pertenece a ella, a quien se lo dio su anterior marido que murió antes de su matrimonio actual. Para la protagonista es muy difícil dejar ir ese coche porque le conecta a él. Me encantó la idea de lo difícil que es superar el dolor y cómo el amor es lo que te ayuda a hacerlo.
En Modern Love, las localizaciones tienen mucha importancia. La mayoría de los episodios ocurren en Nueva York, pero este no…
Grabamos en Dublín y en las montañas de Wicklow. Esos campos de Irlanda están llenos de tanta magia, misterio e historia. Además, hay algo muy bonito que es la idea de poder conducir; a mi personaje le encanta. Y no la vemos conduciendo atascada en los semáforos porque hay muchos coches más, ella está entre montañas en estos caminos solitarios. Para mí, el paisaje que la rodeja tiene mucho que ver también con cómo recuerda a su marido y cuánto le quiere. Pasa por el lugar donde él le propuso matrimonio, el lugar donde ella y su hija esparcieron las cenizas… Este lugar es donde ella vive, pero creo que también es algo que le ayuda a que disminuir su tristeza, porque es algo en constante cambio.
Esta historia es sobre cómo el coche que le recuerda a su amor. ¿Tienes algún objeto especial que te recuerde a alguien?
Sí, mi madre murió hace unos meses y cada carta, cada nota o cada joya que tengo de ella es increíblemente importante para mí. Me encanta sacar esos objetos y estar con ellos porque es como estar con ella. Huelen a ella y me recuerdan a ella. Son objetos que los atribuyes a esa persona y creo que solo te das cuenta de eso cuando alguien fallece.
¿Cuál ha sido el mejor desafío del episodio?
El mayor desafío, para mí, fue comprender cómo podía estar enamorada del marido con el que está casada ahora cuando, claramente, el amor de su vida era el que falleció. Eso fue lo que lo hizo difícil, pero también me gustó, porque tenía que dejar que a mi personaje la quisieran de nuevo. Tuve que encontrar la manera de darle valor a ese segundo matrimonio y saber que era bueno, aunque me resultase complicado. Es importante recordar que existen todas estas posibilidades en el amor. Como seres humanos somos desordenados y fallamos, pero el amor que nos tenemos unos a otros es maravilloso y sanador.
¿Cómo es ponerte al frente de una historia y un personaje que sabes que son reales?
Para mí hay un respeto y una conexión real con la historia cuando sabes que es verdad y está basada en la vida de alguien. Estás contando algo que le ha ocurrido realmente a una persona. Eso hace que tu experiencia como actriz sea diferente porque existe un gran nivel de veracidad en la historia. Yo siempre estoy emocionada cuando estoy en rodaje, pero con Modern Love hubo un elemento adicional de fascinación por esta razón.
Tuviste que desarrollar un personaje complejo para un episodio de solo 30 minutos…
La verdad es que me hubiera gustado que fuera un largometraje y ver expandirse la historia. Pero eso es lo maravilloso de Modern Love; han elegido estas historias que son películas a pesar de que el tiempo es muy corto. Yo sentía estaba haciendo una película.
Llevas 30 años en la profesión, ¿estás cómoda con los papeles que te ofrecen para tu edad y experiencia?
Sí, me gustan los proyectos que recibo, pero no fuese así crearía yo esas oportunidades. No creo que a mí edad deba ser una actriz que dependa de que la contraten. No porque no haya suficientes papeles, sino porque no quiero quedarme sentada esperando a que alguien me llame para trabajar. Una de las mejores cosas de envejecer es profundizar en lo que haces para ganarte la vida; hay un nivel de experiencia que solo llega cuando has estado trabajando mucho tiempo. Y es ahí cuando comienzas a buscar más formas de expresar todo lo que estás aprendiendo como persona. Es realmente brillante y extraño. Es algo así como la historia de Benjamin Button: sientes que tu cuerpo se está deteriorando, pero tu espíritu, energía, sabiduría y tu capacidad de trabajo se están volviendo cada vez más fuertes, más salvajes y más potentes.
¿Qué otro proyecto de tu carrera crees que representa también el concepto de «amor moderno»?
El indomable Will Hunting es una muy buena historia de amor para pensar en dónde estamos en este momento y lo que nos mueve. La brecha económica se está agrandando cada vez más en todo el mundo y se trataba la idea de que alguien puede ser extremadamente privilegiado o increíblemente talentoso pero no tener el mismo privilegio. Es muy difícil cerrar esa brecha y encontrar el camino de amor que los conecta. Y no sabemos qué sucede al final de la película, si realmente la encuentra y su relación funciona, pero me encanta la idea de que será el amor el que lo haga posible. Creo que es una idea bastante moderna.
La temporada 2 de ‘Modern Love’ está disponible en Amazon Prime Video.