El estreno de Leonardo ha puesto sobre la mesa de nuevo el eterno debate de las licencias creativas y de dónde se establece el límite entre la realidad y la ficción cuando se aborda una figura pública en una obra audiovisual. Esta coproducción europea, que podemos ver actualmente en TVE y que está disponible en Amazon, recupera ciertos elementos de la vida de Leonardo da Vinci para crear una serie dramática, en la que hay muchos otros elementos que se han ficcionado. Aidan Turner (Poldark), su protagonista, era consciente de a lo que se enfrentaba desde que aceptó el papel, así que no le ha sido difícil afrontar las quejas por la falta de rigor histórico de la ficción.
Una historia real con algunas brechas
Aunque todos sabemos quién es Leonardo da Vinci, no tanta gente se ha interesado por su vida más allá de sus famosas obras. Es justamente este el eje central de Leonardo: mostrar las luces y las sombras del genio metiéndose de lleno en cómo era él como persona. «Tenemos sus obras, su filosofía, su trabajo como botánico y sus cuadernos, pero no tendemos a hacernos preguntas sobre cómo era él, sobre su sexualidad», comenta Turner. «Todo esto lo mostramos en la ficción porque, aunque hay bastante material que sugiere que él era homosexual, ninguna serie o documental lo ha tratado, por lo que nosotros queríamos enseñar todo».
Respecto a la falta de rigor histórico de la ficción, el intérprete deja claro que «cuando eliges hacer un papel como este, ya eres consciente de que la gente tiene una imagen sobre Da Vinci», lo que hace más complicado contar la historia. Sin embargo, se defiende diciendo que «si estás haciendo un documental, es mucho más fácil averiguar cuáles son los hechos y ponerlos en pantalla. En Leonardo representamos todo lo que se sabe de él, pero también hay huecos que llenar, porque ¿quién era esta persona? Era un ser humano que tenía motivaciones, egos, inseguridades y todos estos atributos que tienen los humanos».
Los elementos ficticios añadidos
Turner nos habla de algunos de esos los elementos ficticios que han añadido al relato del artista italiano. El primero de ellos es el personaje de Caterina de Cremona (interpretado por Matilda De Angelis): «Era una persona que aparece en sus documentos, que había mencionado junto a otros nombres. Ella existía, pero no sabemos si eran amigos cercanos, si ella era su musa o simplemente una modelo que posó para él, pero los guionistas decidieron imaginar quién podría haber sido ella», explica.
Además, en la serie se muestra cómo el personaje de Freddie Highmore le investiga para descubrir quién mató, precisamente, a Caterina, un hecho del que se le culpa. Este elemento no tiene nada que ver con la realidad. «Algunas personas piensan, ¿por qué tienen que mostrar esto?, ¿por qué tienen que inventarse una historia cuando estamos hablando de una de las personas más grandes que haya existido jamás?, ¿no tenemos suficiente material?», expone Turner, «Entiendo lo que quieren decir, pero tienen que entender que es una serie dramática y hay que añadir ciertos elementos ficticios». Así, el protagonista de Leonardo zanja el tema diciendo que «estamos haciendo una serie, no un documental».
‘Leonardo’ se emite los jueves en La 1 y está disponible completa en Amazon Prime Video.