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El hotel Cecil y el Castillo de Holmes que inspiraron ‘American Horror Story: Hotel’

Set de ‘American Horror Story: Hotel’. (Fuente: FX)

“Siempre he estado muy obsesionado con el Hotel Cecil, que está en el centro de Los Ángeles. Es donde se rumoreaba que se había alojado el Acosador Nocturno y donde tenían aquel video de la chica subiendo al ascensor y que luego desapareció. Ese lugar ha tenido muy mala prensa a lo largo de los años, pero esa es solo una de las inspiraciones. Creo que, en cierto modo, también hacemos un guiño muy cariñoso a la película El resplandor en el primer episodio”. Quien habla es Ryan Murphy en una entrevista a Collider en 2015, en plena promoción de American Horror Story: Hotel, la quinta temporada de su franquicia de terror que protagonizaba Lady Gaga.

En esas líneas, Murphy reconoce que la idea de aquella temporada nace, en parte, por la leyenda negra del hotel Cecil, ahora de actualidad por la serie documental Escena del crimen: Desaparición en el Hotel Cecil de Netflix, y además hace referencia al vídeo del ascensor que captó las últimas imágenes de Elisa Lam, cuya desaparición e investigación del caso es el centro del mencionado true crime de la plataforma roja. Pero, ¿hasta qué punto llegaba la inspiración de esta temporada en el Cecil?

Las temporadas de American Horror Story están plagadas de alusiones y referencias a casos reales o historias folclóricas, pero rara vez las adaptan tal y como las conocemos, sino que proponen una revisión del relato. En Hotel no hay mención directa a Elisa Lam, pero sí se juega con la idea de que en el hotel Cortez, que así se llama el ficticio, también situado en Los Ángeles, sabes cuándo entras, pero no cuándo sales (ni cómo). Y, sobre todo, con la premisa de un lugar como epicentro del mal, algo ya utilizado por la serie en Murder House o Asylum, o como imán para gente malvada.

Hotel Cortez, hotel maldito

(Fuente: FX)

Es en esta idea donde verdaderamente se conecta American Horror Story: Hotel con la leyenda negra del Cecil. Porque lo que hizo que este caso de la turista desaparecida en extrañas circunstancias fuese tan atractivo para la prensa y los ciberinvestigadores era todo lo que lo rodeaba, ese halo de misterio que deja imaginar que puede haber algo más increíble detrás, ya sea una conspiración policial o una explicación sobrenatural. El Cecil era atractivo no solo por lo que estaba pasando, sino por todo lo que había sucedido con anterioridad.

Como se cuenta en la serie documental, y hacía referencia a ello Ryan Murphy, se dice que el hotel Cecil pudo ser la guarida del Acosador Nocturno en sus años más sangrientos. El psicópata que aterrorizó en los ochenta a la ciudad de Los Ángeles por sus crímenes sin patrón alguno (tiene su propia serie documental, también en Netflix), aparecía brevemente en Hotel interpretado por el actor Anthony Ruivivar, aunque tendría un papel más protagonista en otra de las temporadas, American Horror Story: 1984. Pero quedándonos en la temporada de Lady Gaga, ahí Richard Ramírez era uno de los invitados de la Noche del Diablo a la que también acudían otros asesinos reales como Jeffrey Dahmer o Aileen Wuornos.

El de Ramírez no sería el único caso que alimentaría la oscura leyenda del hotel Cecil. Jack Unterweger, un hombre austriaco que había sido condenado por asesinar a varias prostitutas, salió a la calle tras quince años en una cárcel de su país donde cumplía cadena perpetua como ejemplo de reinserción social. Sin embargo, volvió a matar en 1991 cuando se hospedó en el Cecil (se dice que atraído por la figura de Ramírez) por el asesinato de otras tres prostitutas. Antes de esto, en 1947, se sitúa el bar del Cecil como el último lugar en el que se vio a Elizabeth Short, apodada la Dalia Negra (a quien también vimos en la serie, en este caso en Murder House).

Más allá de la leyenda, viendo el documental y la serie se hace palpable que también existe una inspiración estética de American Horror Story en el Cecil. Ambos hoteles -el de la serie era un plató- tenían una fastuosa recepción cercana a un bar, así como una balconada en la primera planta que rodeaba esta gran estancia. El aire decadente, el lujo trasnochado, los angostos pasillos o la fachada con su rótulo también son similares en uno y otro.

Castillo de Holmes, otra inspiración de ‘AHS: Hotel’

(Fuente: FX)

Pero además del hotel Cecil, hubo otro establecimiento turístico del terror que sirvió de gran inspiración para Hotel, a través de uno de sus pintorescos y macabros huéspedes. En esta temporada, Evan Peters interpretaba a James March, un asesino en serie que seguía en el Cortez en calidad de fantasma y que había hecho ahí incontables fechorías, además de organizar la ya mencionada reunión anual de célebres asesinos. El personaje se inspira en la figura de H. H. Holmes (su nombre completo era Herman Webster Mudgett, pero también se le conoce como el Doctor Holmes), un asesino en serie responsable de una cifra indeterminada de muertes, que van desde la veintena hasta varios centenares.

El hotel Cortez de la serie es un auténtico laberinto donde los pasillos, plantas y recovecos no parecen tener sentido, pero sí lo tienen: es una trampa mortal. Y esto está inspirado, precisamente, en el hotel que H. H. Holmes edificó en Chicago, coincidiendo con la Exposición Mundial Colombina de 1893, el Castillo de Holmes (en inglés, Holmes Castle) Nadie llegó a ver los planos completos del edificio, pues Holmes usaba una argucia: encargaba la construcción a una empresa que no pagaba y, cuando se iba, otra seguía la labor sin tener nunca la imagen completa de lo que se estaba haciendo.

Una vez terminado, Holmes atraía hasta su establecimiento a un perfil concreto de turista/víctima: mujeres jóvenes y ricas que viajaban solas. Una vez dentro, se encontraban un laberinto con escaleras que no llevaban a ningún sitio, trampillas, habitaciones secretas, paredes falsas y, por supuesto, lugares desde donde espiar. Todo estaba dispuesto para sembrar el terror y, por supuesto, matar a las muchachas de forma macabra. Finalmente, con el fin de la Exposición Mundial, el Castillo de Holmes empezó a dar pérdidas económicas y H. H. Holmes quemó la planta superior para cobrar el seguro, lo cual fue el principio de su fin: no solo le pillaron en la estafa sino que la investigación de la compañía de seguros dio paso a una policial en la que se descubrió lo turbio que era el lugar y él terminó siendo juzgado y ahorcado.

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